Mediante una tarjeta informativa, la alcaldía señaló, pese a que el parque está ubicado en territorio de Tlalpan, nunca se les solicitó su opinión al respecto.
En su comunicado, la alcaldía recordó que Tlalpan ha sido reconocida durante tres años consecutivos como «Ciudad Árbol» por la Arbor Day Foundation. Esto en el contexto del programa Tree Cities of the World de la FAO, debido a su compromiso con el cuidado y conservación de los árboles.
Nos pronunciamos en contra de la consulta vecinal que la Secretaría de Medio Ambiente y el propio parque de diversiones realizan desde el 13 hasta el martes 16 de julio, toda vez que es parcial, no informa claramente, pero, sobre todo, no pregunta si las y los tlalpenses están dispuestos a perder una parte del bosque», señaló la alcaldía.
La alcaldía hizo hincapié en: la compensación con árboles jóvenes, como se propone en el proyecto, no es una solución viable. Esta medida, según el comunicado, generará un deterioro ambiental significativo y contribuirá al cambio climático. Estos factores ya está afectando gravemente a Tlalpan y a la ciudad, con problemas como la escasez de agua e inundaciones severas. «Para la alcaldía, la restitución de árboles no es suficiente motivo para pretender talar árboles que se encuentran en edad adulta y que hoy son un auténtico pulmón para la Ciudad», añadieron.
Además, se lamentó que el proyecto de Six Flags no informe adecuadamente sobre el impacto real y la dimensión exacta de la afectación en la recarga del acuífero, la flora y fauna endémica de la zona. «Condenamos que se privilegie el interés económico por encima del bien superior de la comunidad de Tlalpan y el patrimonio ambiental de la ciudad», indicó el comunicado.
De igual forma, la alcaldía hizo un llamado tanto a la Secretaría de Medio Ambiente como a Six Flags para reconsiderar el proyecto del nuevo juego mecánico. Asimismo, llaman a optar por un proyecto que se adecúe a las condiciones ambientales y a la extensión autorizada del parque.
La demarcación subrayó que la presión ambiental derivada del crecimiento urbano, la tala clandestina y el descuido del medio ambiente no pueden continuar. Esta situación generó una preocupación considerable entre los residentes de Tlalpan, quienes temen que la pérdida de estos árboles afecte la calidad del aire y el equilibrio ecológico de la zona.
NotiPress/Patricia Manero
Patricia Manero
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